Buscando mi sonido
¡Hola!
Les quiero compartir el siguiente informe que con gusto elaboré en base a mis experiencias sobre la búsqueda de mi sonido a lo largo de más de quince años.
Para comenzar voy a hablar de los elementos que complementan al sonido del saxofón. Éstos son: la boquilla, abrazadera y caña.
Algunas de las referencias citadas fueron tomadas del libro “Sobre saxos y algo más” de Enrique Propato (luthier Argentino), el cual recomiendo leer para ampliar conocimientos de sonido, construcción y ejecución, tanto del instrumento como de sus accesorios.
Los accesorios son tan importantes como el instrumento ya que conforman el primer tramo por donde el aire va a pasar antes de ser proyectado por la campana del instrumento.
Esto quiere decir que el sonido del saxofón también dependerá de la calidad de sus accesorios y la combinación de éstos muchas veces son tan importantes como la calidad del instrumento en sí.
A continuación voy a compartir algunos de los detalles que me ayudaron a la hora de elegir boquillas, abrazaderas y cañas.
¡Espero que te sean de ayuda en tu búsqueda!
BOQUILLAS
Son de fundamental importancia para la emisión del sonido y encontramos de distintas aberturas, modelos, materiales y diseños.
Abertura de la boquilla.
Es un aspecto fundamental al momento de elegir una boquilla y sobre todo cuando se comienza a estudiar. Hay boquillas más abiertas y más cerradas. La abertura es la separación que hay entre la caña y la punta de la boquilla y para comenzar a estudiar te recomiendo usar una boquilla de poca abertura (por ejemplo Yamaha “4c”). Cuanto más cerrada sea la distancia entre la caña y la boquilla, se requiere menor cantidad de aire. Cuanto más abierta sea la distancia, se requiere mayor cantidad de aire. Esta abertura se complementará con la elección de la numeración de la caña (ver sección cañas). A su vez, el sonido de la boquilla dependerá del tipo de abrazadera que se utilice, junto a la conformidad bucal y los labios del intérprete.
Generalmente al comprar un saxo nuevo (de origen Chino) suelen traer su boquilla de fábrica. Si bien es una boquilla que suele funcionar para estudiar durante el primer período, el material de la misma suele ser de baja calidad y recomiendo que luego de los primeros meses de estudio comiencen a probar algunos modelos y sonidos para adquirir mayor calidad de sonido. Para eso es recomendable consultarle al docente, colegas, y también recomiendo escuchar saxofonistas de varios estilos para reconocer el perfil que más te gusta. Esta audición te hará más clara la idea de sonido que estás buscando y te dará una referencia a la hora de elegir una boquilla (ya que es un mundo de infinitas posibilidades !).
Cámaras.
La cámara también define el tipo de sonido de la boquilla.
Las cámaras pueden ser: 1) simple o directa, 2) cámara doble, 3) cámara triple, 4) de sección grande, mediana o pequeña, 5) de sección circular,cuadrada, rectangular, etc.
Las boquillas de cámara directa en general tienen un sonido más profundo y menos brillante. Se denominan directas porque el plano inclinado dentro de la boquilla - desde la punta hacia adentro - es uno solo sin ninguna quebradura. En cambio las de cámara doble o tríple presentan un quiebre, o dos, con el objetivo de focalizar el ingreso del aire y generar mayor presión del mismo resultando un sonido más potente y espontáneo.
Clasificación de boquillas según su material.
Existen distintos materiales, diseños y modelos para los distintos géneros musicales. Es recomendable elegir la boquilla entorno al estilo que estás buscando interpretar para lograr un mejor resultado.
Boquillas de pasta sintéticas (Ebonite/Hard rubber): Su material es similar al plástico y encontramos de color negro, blanco y azul. También se conocen como boquillas de “pasta”. Suelen ser las de mayor uso y todavía se encuentran algunos modelos hechos a mano (suelen ser las más buscadas y las de mayor costo). Tienen un espectro bastante amplio, de gran riqueza armónica y cubren muy bien todo el registro del instrumento. Hay modelos que tienen cámara, esto significa que tienen una modificación en su cara interior a modo de “escalón”, resultando una boquilla espontánea pero a veces con sonido brilloso y nasal (más agudo).
Boquillas de Ebonite especiales: Son boquillas hechas con una aliación de pasta sintética y agregados de partículas de metal en su masa. Esto le agrega un poco de brillo y las hace más resistentes al desgaste. Las más frecuentes son las boquillas de la marca “Rico” (EEUU) que las produce con el nombre “Metallite” y son de color gris. Suelen ser de menor costo que las de Hard rubber y no llevan ningún trabajo a mano.
Boquillas metálicas: Son boquillas de diversos materiales metálicos y aleaciones. Suelen ser boquillas de gran proyección, generalmente con brillo y utilizadas para estilos como el rock, funk, fusión y jazz. Hay de color plateado, dorado, más angostas y más robustas. Suelen ser boquillas con mucha personalidad y encontramos algunas muy espontáneas que facilitan la emisión de los sobreagudos y armónicos. Es recomendable no comenzar a estudiar con estas boquillas porque suelen ser “duras” para el desarrollo de la embocadura. Una vez que podemos dominar una boquilla de pasta podemos comenzar a probar estas boquillas y dependerá de la sonoridad y el estilo que estés buscando interpretar.
Boquillas de madera: Fueron utilizadas desde el mismo comienzo del instrumento en el siglo IXX. Tenían un sonido muy envolvente y muchas veces carentes de brillo en los agudos. Fueron desplazadas por la llegada del material Ebonita/ Hard Rubber y reaparecen hacia 1984 pero con tecnología computarizada, diseño moderno y fueron sustituidas por material de ébano o de granadilla. Estas boquillas tienen un sonido especial, mezclan el sonido antiguo pero con brillo moderno y se adaptan tanto al estilo de jazz como al clásico por tener una gran calidez de emisión. Se pueden encontrar algunas boquillas de madera hechas a mano por luthiers.
Para lograr buen sonido no sólo depende de encontrar la boquilla indicada, sino que se debe profundizar en la técnica de emisión de sonido, notas largas, estudio del instrumento y la boquilla. También recomiendo estar atentos al momento de comprar una boquilla usada pues a veces suelen tener algunas modificaciones o golpes en sus caras internas que afectan al sonido y en algunas oportunidades no se visualiza fácilmente. Para eso es bueno contar con el apoyo del docente o algún colega que pueda orientarnos a la hora de comprar.
CAÑAS
Las cañas son un tema delicado y de mucha polémica para los instrumentistas de vientos de “caña”.
Se la conoce como “el alma del saxofón” pues es lo que le da vida al saxo y sin la vibración de ella no hay sonido del instrumento. Es una pieza muy frágil de romperse en su extremo y hay que tratarla con cuidado a la hora de secarla y guardarla en el porta cañas.
En mi caso luego de tocar no acostumbro a dejar la caña puesta en la boquilla ya que la saliva suele echarla a perder y siempre la seco con un paño y la guardo en su porta cañas para que se mantenga plana. Es importante saber que la humedad de la saliva, del ambiente y el mal secado de la misma puede afectar al sonido de la caña y hasta puede estropearla.
Hay de diversas marcas, modelos, y tipos de materiales de caña: natural y sintética.
Las cañas sintéticas tienen la ventaja de ser más duraderas y no suelen romperse pero tienen un sonido particular que en lo personal no las elijo. Pueden ser efectivas para estudiar y evitar comprar frecuentemente pero también suelen ser más costosas que las cañas naturales. Las “plasticover” son las más conocidas y llevan un baño de laca, las cuales suelen ser más resistentes y durables, pero de menor resonancia de armónicos. También encontramos cañas que son completamente de plástico.
Las cañas naturales tienen la ventaja de tener un sonido mucho más rico en armónicos pero tienen la desventaja que al ser un producto natural suelen ser más delicadas e impredecibles, es decir, a veces no resultan de buen sonido por su temprana cosecha y suelen resultar de mala calidad. En este caso suelen ser más duras y menos espontáneas (de color verdosas o amarronadas) y las que se encuentran en su mejor momento de cosecha son las de color “amarillo dorado”. Por eso, cuando vayan a comprar cañas hay que estar atentos y si no compran una caja, siempre es recomendable al menos elegir dos o tres cañas por si nos toca alguna en malas condiciones.
Como mencioné anteriormente, la apertura de la boquilla suele compensarse con la dureza (numeración) de la caña: a mayor apertura de la boquilla se recomienda una caña más blanda y a menor apertura de la boquilla se recomienda una caña más dura.
Esta combinación facilitará la emisión del sonido, resultando más espontáneo y permitirá que la caña resuene en su totalidad de armónicos. Recomiendo comenzar con una caña número 2 por un período corto ya que la musculatura de la embocadura debe desarrollarse y luego les recomiendo fortalecer su embocadura y usar cañas número
2.5 / 3 / 3.5
A continuación les comparto una tabla correlativa de las distintas numeración y marcas de cañas:
A pesar de estas recomendaciones se hace difícil encontrar una caña que suene como se desea y hay que tener en cuenta que al usar una caña nueva siempre será más dura las primeras horas de uso, por lo cual se puede alternar a una caña con uso para continuar estudiando sin lesiones en los labios.
Generalmente no es recomendable acostumbrarse a tocar con una caña muy blanda pues la afinación será más compleja y el sonido no tendrá mucha proyección. En cambio, al tocar con cañas más duras se fortalecen los músculos de la embocadura, llegando cómodamente a las notas agudas y brindando mayor armónicos en todo el registro del saxofón.
Para elegir las cañas recomiendo mirar el plano superior a contra luz y observar las fibras (líneas paralelas). Éstas deben ser delgadas, derechas, espaciadas entre sí, en forma pareja y no deben llegar a la punta de la caña. También recomiendo prestarle atención al corte de la caña (línea que separa el plano superior del inferior): hay cortes transversales y cortes curvos. Si es curvo, debe ser lo más parejo y simétrico posible y si es transversal, debe tener sus cantos laterales iguales y de la misma altura pues ello determina que la caña esté balanceada correctamente. También la curvatura del borde superior de la caña debe ser pareja y coincidir con la curvatura de la boquilla.
Las cañas también pueden ser retocadas por el ejecutante para que sean más blandas, con mayor brillo o más cuerpo, pero no suele ser una tarea sencilla y no es recomendable para los principiantes. Para esto hay distintos accesorios que se venden en internet como por ej: “Reed Geek
En mi opinión suelo prestar mucha atención cuando compro cañas y también guardo las que voy descartando pues a veces suelo reutilizarlas y hasta a veces me encuentro con cañas que he descartado de primera y luego me sirven. Esto es porque el tiempo que han reposado les ha ayudado en su proceso.
Recomiendo probar distintas marcas, numeraciones, buscar el sonido que más les guste y no descartar ninguna caña que compren pues si no se rompen, la mayoría suele tener una segunda oportunidad de uso.
ABRAZADERA ULTIMATE BY FRANCOIS LOUIS
ABRAZADERAS
Las abrazaderas son un elemento importante para el sonido como son las boquillas y las cañas. Una buena boquilla o caña pueden disminuir su rendimiento porque la abrazadera no es la adecuada, porque no ajusta bien o esté mal colocada con respecto a la caña.
La función principal de la abrazadera es ajustar firmemente la caña a la boquilla. Pero esta firmeza debe permitir que las fibras de la caña puedan vibrar al máximo para lograr un sonido claro y rico en matices. Es importante saber que dependiendo de los distintos modelos de la abrazaderas lograremos mayor o menor vibración de la caña.
Tipos de abrazaderas.
Encontramos variados modelos, materiales, diseños y grosores. Las más habituales son las que traen las boquillas de fábrica (las que vienen con los saxos nuevos) y son las que traen dos tornillos. Son abrazaderas simples, standards, que no agregan un carácter especial al sonido sino que cumplen su función de ajustar la caña.
Luego hay otros modelos de abrazaderas metálicas que pueden enriquecer el sonido y permiten vibrar mejor la caña. Éstas suelen ser más angostas en sus laterales, de mejor ajuste a la boquilla y pueden traer un solo tornillo. En mi caso uso una excelente abrazadera con estas características y la recomiendo totalmente. Es una abrazadera marca Francois Louis modelo “Ultimate”, muy utilizada en el estilo de jazz. Es una abrazadera muy firme, de gran espontaneidad y permite vibrar la caña en su totalidad ya que su construcción es de 4 cilindros y 6 caras, con una placa en la cara interna para que la caña resuene más.
También encontramos abrazaderas de cuero que suelen aportar mayor calidez al sonido pero no así tanta espontaneidad. Por lo general no suelen tener un sólido ajuste a la boquilla. Puede suceder que con el tiempo y el uso del material se estiren y pierdan su firmeza al ajustar.
Otra opción son las abrazaderas de hilo, pero son de similares características a las de cuero y dudo que tengan buen ajuste. Particularmente no he tenido la oportunidad de probar estas abrazaderas.
A continuación les comparto mi SET UP actual :
Saxo alto Conn Transitional, boquilla de pasta marca Ted Klum (modelo versitone acustimax) número 5, abrazadera Rovner Versa (simil cuero), cañas D´addario N° 3s, Vandoren java N°3, Alexander New York N°3..
Saxo tenor Mark VII, boquilla de pasta marca Daddario Select Jazz Nº7, abrazadera Francois Louis (ultimate ligature), cañas Vandoren Java N° 3, Daddario Organic Reeds Nº3.
SAXO ALTO CONN TRANSITIONAL